QUERIDOS LECTORES, LA PECERA SE VA DE VACACIONES

VOLVEREMOS CON MUCHA ENERGÍA Y CON MUCHOS TEMAS INTERESANTES

GRACIAS A MIS PECES POR TODO EL ESFUERZO, POR TODA LA FUERZA, POR TODA LA BELLEZA

¡VOLVEMOS EL 1 DE SEPTIEMBRE!

SALUDOS

El futuro y el sentido de la vida

A veces la vida te sorprende cuando creías que ya le habías cogido el tranquillo, cuando consolidas situaciones y manejas el timón, ilusa de mi, nunca aprenderé, quizás por eso, la vida me examina una y otra vez, pero nunca apruebo, así que repito curso, creo que me gusta, me gusta mucho equivocarme, me gusta mucho darme cabezazos, me gusta mucho aprender siempre, me gusta mucho que me sorprenda la vida.

Creo que algo de sentido le he pillado en estos años de repetir, repito en ilusiones, repito en esperanzas, repito en amor, y me la vuelvo a pegar, quizá es porque estoy viva.

Quizá porque eso es vivir, quizá porque lo más bonito de vivir es no aprobar nunca en felicidad y volver a repetir las asignaturas de la inocencia y la ilusión. Quizá porque el sentido de la vida es aprender, aprender siempre, y por muy experto y maduro que te consideres, encontrarte que hay más y más asignaturas y más niveles que descubrir.

Qué ironía, hoy que me encuentro ante un nuevo reto y ante una nueva etapa (no buscada) en mi vida, y me ha tocado escribir sobre ella, y sobre el futuro, y así estoy, abriendo un nuevo melón a ver qué trae, y si no me gusta, pues abriré otro melón, qué le vamos a hacer, abrir puertas, y puertas, de qué me puedo quejar? peor sería tener delante un muro de piedra y no tener ni pico ni pala para abrirle un boquete, aunque creo que entonces empezaría a darle cabezazos, de lo bruta que soy y lo que me gustan los retos.

Deseadme suerte y ánimo, porque voy a seguir abriendo puertas y melones, y si no, a cabezazos. Es mi vida¡ nunca dije que la deseara aburrida, antes muerta que aburrida¡

La Malamala

Aquí os pongo un fragmento de un articulo q me ha parecido muy interesante sobre la mentira, las consecuencias de mentir, y por qué se miente... si quereis leerlo entero, os dejo el link:

http://www.cop.es/colegiados/A-00512/mentira.html

Mentir es un recurso fácil de valer sin tener que pasar por esfuerzos ni penurias, aunque el precio que se corre es la posibilidad de ser descubierto. En esto sucede algo similar a la persona que lanza rumores falsos para disminuir a las personas que envidia: puede ser descubierto y la conducta desvelada, ir en su contra desprestigiándolo ante a los que quería influir.

Mientras que la persona sincera no tiene que vigilar la versión que da de sus anécdotas y los episodios vividos, porque los transcribe al dictado de su memoria, en cambio el mentiroso debe controlar qué versión da de su historia, para que resulte coherente con la escuchada por cada persona ante la que ha presumido.

Cuanto más se cae en la tentación de mentir más difícil es controlar la abundante base de datos de las versiones dadas y más imposible resulta comentar, repetir o seguir con coherencia lo novelado, de forma que los detalles chirrían y de pronto un personaje famoso es novio de una prima mientras que antes lo era de una hermana, estuvimos dos años estudiando en el extranjero mientras que esos mismos años estudiamos un Master de prestigio en la localidad donde vivimos, conocemos a quien luego resulta que no nos conoce, etc. .

El hábito se mentir se puede transformar en un trastorno de la personalidad que podríamos llamar 'seudologia fantástica' que es una compulsión a imaginar una vida, unos acontecimientos y una historia en base a causar una impresión de admiración en los espectadores.

Este afán por impresionar esta basado en la imperiosa necesidad de resultar valiosos e geniales por medios tramposos ya que por los naturales de la simpatía y ser espontáneos dudamos el poder conseguirlos.

Refleja, por un lado, la ambición de ser dignos de amor y "ojito derecho" de los demás como antes de ser destronamos por el proceso de maduración lo éramos de los padres; por otro lado, se pone de manifiesto nuestra profunda duda de no ser dignos en base a la distancia, la dureza, el aislamiento y la falta de adaptación que sufrimos, que asemejan pruebas de algún tipo de minusvalía.

El mentiroso fantasioso coge el atajo de robar atención y aprecio por la vía del fácil engaño (las palabras son cómodos sustitutos de los hechos) en vez de por su Ser-sincero, tal vez mucho mas modesto de lo que su ambición soporta.

No se conforma con ser una persona cualquiera -tal vez se vería a sí misma con excesivo desarraigo-, sino que desea ser siempre una personalidad de primera magnitud, de esas que los demás admiramos embelesados y envidiosos.

MUSICO DE GUARDIA

Esperare impaciente la llegada de otro tren
cargado de palabras hacia media noche,
y esta vez, con la atención de un centinela
por primera vez, tengo una patria, tengo una bandera.

Quemé todas mis naves justo cuando iba a partir,
vendí las pieles de los osos que jamás cacé,
y ahora abrígame, no con la lealtad de un mercenario,
anúnciate, yo solicito tus servicios a diario.

Vivo en un escenario del tamaño de dos lunas,
voy cuesta abajo por tu cuerpo y ya no tengo cura.
Soy músico de guardia desde la cuna a la tumba,
plantado como una farola al norte, al norte de mis dudas.

Prefiero la seguridad que da lo incierto
saber que el tiempo no será jamas mi amigo,
y no me fío de los que a pecho descubierto me vacilan
con una lista de consejos aprendidos.

Me haré socio del viento, y digo yo que me irá bien,
es más sincero cuando no hay contrato que firmar.

Y allí te espero, en el momento en que la pluma conoce al papel
en el instante en que mis frases me desnudan.

Vivo en un escenario del tamaño de dos lunas...

Hay distintos tipo de envidia, entre los cuales los dos mas importantes y en los que se derivan todo los demás son la envidia sana y la envidia mala.
Por definición, la envidia sana es aquella que sientes con respecto a alguien querido, y que por lo cuál tiendes a reprimir para evitar conflictos. Luego tenemos la envidia mala, esa que te corroe por dentro y que te hace odiar a alguien con quien, por norma general, no tienes ningún vínculo especifico.
Lo que me pasa a mi a menudo es que me da por pensar pq una es sana y la otra es mala. A mi la envidia "sana" me provoca un mal cuerpo impresionante, no porque le desee algun mal a esa persna, sinó porque me la tengo que reprimir, y todos sabemos que lo que se reprime, malo! Por el contrario la envidia denomnada como "mala" es la que mejor me sienta. Es cierto que socialmente es horrible, per hay que reconocer que te quedas de un descansado que ni te cuento...
Y ahí está donde me pierdo. Resulta que la "sana" es "mala", y la "mala" es "sana", pero la "sana" es "buena" y la "mala" es "malvada" o algo así. No se si me llego a explicar bien.
Solo pienso que no está mal envidiar abiertamente al projimo, aunque sea socialmente reprochable, al final una se cansa de ser políticamente correcta, que todos sabemos que la incorrección es lo más liberador del mundo.
Así qeu a modo de conclusión, he decidido que a partir de ahora me dejaré de frases como "que envidia que me das, pero de la sana, eh!" y empezaré a soltar otras estilo "que sepas que la envidia me corroe por dentro así que mejor dejemos el tema antes de que acabemos mal".
Un poco de sinceridad, por favor...Todos viviermos más felices envidiando al projimo libremente!
Al fin y al cabo, la envidia es lo que nos empuja a mejorar!

Un pez rojo. A veces me miró en el espejo y veo un pez rojo. Un pez vivaz, poderoso, ardiente y temerario. Rojo. Otras veces soy azul, tranquilo, reposado, prudente. Todo, todo depende.

A lo largo de mi vida me he encontrado con infinidad de colores. Todos ellos en forma de pez. Todos en forma de tristeza de alegría, de vano recuerdo o de cicatriz. Peces. Me he pasado mi vida persiguiendo peces. Clasificándolos por colores según la etapa de mi vida. Están los amores frustados de la adolescencia y todos aquellos que aún asfixian en un rincón, de negro. Están mis primeros besos, mi primer te quiero, mi primer abrazo, mi primera palabra..nadando de blanco puro, radiante, sonrisa. Estás tú de rojo, sangrando. Están mis amigos de verde, dando esperanza y palabras. Estoy yo de espejo, de reflejo, de sentimiento.

Me he pasado mi vida fingiendo ser un pez payaso en un acuario demasiado pequeño. Y no.Yo nado en el océano. Un océano de creatividad. Un océano inmenso. Dónde no importa la serenidad de un pez azul, la alegría electrizante de un pez verde, o la fuerza de un pez rojo. Que más da que en medio de mil peces negros se camufle uno blanco, si al final, al final desde lejos siempre se ve azul grisáceo. Siempre se ve agua

. Y todos, todos formamos parte de ella.